El resumen de hoy
En los últimos años, Arabia Saudita, a través de su fondo soberano (PIF), ha sido protagonista de noticias relacionadas con inversiones multimillonarias en el deporte. Han otorgado contratos de locura, como el de $200 millones de dólares al año a Cristiano Ronaldo para jugar en la Saudi Pro League, han invertido $2,000 millones de dólares en la creación de LIV Golf y han adquirido el Newcastle United.
Hoy hablaremos de estas inversiones y de su Visión 2030, que busca diversificar la economía, reducir la dependencia en el petróleo y modernizar la sociedad.
¡Empezamos!
Arabia Saudita es un país con 36 millones de habitantes y un PIB de más de $830 mil millones de dólares (es la economía #18).
Antes del descubrimiento del petróleo, era una nación pobre con una población nómada y que dependía mucho del turismo de musulmanes que visitaban La Meca. Todo cambió en 1938, cuando se descubrió en el país la mayor fuente de petróleo del mundo.
A partir de eso, ARAMCO, una empresa formada por el gobierno saudita y una compañía estadounidense de petróleo, construyó la infraestructura necesaria para la extracción, transporte y exportación del petróleo.
La industria petrolera creció gradualmente y para 1988 el gobierno saudita ya tenía control total de la compañía, transformándola en lo que hoy es Saudi Aramco.
Esta empresa se ha convertido en la compañía de petróleo y gas integrada más grande del mundo, generando ventas superiores a los $500 mil millones de dólares solo en 2022.

Arabia Saudita es consciente de que las reservas de petróleo no son infinitas y de la tendencia hacia las energías limpias. Por esto, en 2016, el príncipe heredero Mohammed bin Salman Al Saud presentó la Visión 2030, cuyo objetivo es impulsar un crecimiento económico sostenible, fomentar el desarrollo social y cultural, y fortalecer la posición global del país.
La Visión 2030 cuenta con el respaldo financiero del PIF, el fondo soberano de Arabia Saudita, que tiene un valor superior a los $600 mil millones de dólares.
El deporte tiene un rol fundamental en este plan y con él, buscan impulsar el desarrollo social, fomentar el turismo deportivo y mejorar la imagen internacional del país.
Este último punto tiene una importancia especial, ya que Arabia Saudita ha sido objeto de críticas por violaciones a los derechos humanos, maltrato a los trabajadores migrantes, apoyo a grupos extremistas y restricciones a las libertades de las mujeres.
Para alcanzar estos objetivos, Arabia Saudita ha hecho inversiones de diferentes tipos, incluyendo adquirir equipos deportivos alrededor del mundo, albergar competiciones internacionales en el país y crear alianzas con las competiciones más prestigiosas del mundo.
Vamos a repasar algunas de las más importantes.
El deporte más popular del mundo para albergar la Copa del Mundo 2030

El fútbol tiene millones de fans en casi todos los países, esto lo hace la oportunidad perfecta para promover la imagen que quieren masivamente. La adquisición del Newcastle United y el contrato de CR7 fueron las inversiones que llamaron la atención del mundo, pero son solo una pequeña parte de lo invertido, aquí te dejamos las más relevantes:
$415 millones de dólares para adquirir el Newcastle United en 2021
$30 millones de dólares al año para tener a Messi como embajador de Turismo
$24 millones de dólares al año por albergar la SuperCopa de España durante 10 años desde 2019
Alianza con el Manchester United para promover su imagen y tienen intenciones de comprar el club en un futuro
+$900 millones de dólares para que Cristiano Ronaldo y Karim Benzema jueguen en la Saudi Pro League por 3 años
Se espera que las inversiones en el fútbol sean cada vez más agresivas, con la meta final de albergar la Copa del Mundo 2030.
La F1 y el golf para enamorar a las élites

La Fórmula 1 y el Golf son deportes que atraen a una audiencia compuesta en gran parte por personas de niveles socioeconómicos altos. Por esto, son herramientas poderosas para llegar a los líderes empresariales a nivel mundial.
Como siempre, las inversiones han sido sustanciales. Este año, surgieron rumores sobre una oferta de compra de la Fórmula 1 por $20 mil millones de dólares (casi cinco veces lo que Liberty Media pagó por adquirir la Fórmula 1 en 2017). Aunque nunca fueron confirmados, queda claro que tienen una estrategia clara para ejercer una gran influencia en este deporte.
Algunas de las inversiones que han realizado son:
$450 millones de dólares por patrocinar la F1 por 10 años empezando en 2020
$650 millones de dólares por albergar el GP de Arabia Saudita empezando en 2021 por 10 años
17% de participación en “Aston Martin Aramco Cognizant F1 Team” en 2022
También, en 2022, tomaron por sorpresa al mundo del golf invirtiendo más de $2 mil millones dólares para crear “LIV Golf”. Lograron atraer a muchas de las estrellas del PGA Tour (USA) y del DP Tour (Europa) ofreciéndoles contratos por cientos de millones de dólares.
Se rumora que le hicieron a Tiger Woods una oferta de $800 millones de dólares, aunque este no aceptó. Tal fue la disrupción en el golf profesional que al PGA Tour no le quedó de otra más que unirse y crear un tour en conjunto.
Los e-sports y la WWE para llegar a las nuevas generaciones
Influir en las nuevas generaciones es otra prioridad y el mundo de los videojuegos es indispensable ya que más de 3 mil millones de personas en el mundo son jugadores activos.
En 2022, el príncipe heredero Mohammed bin Salman reveló su estrategia para convertirse en un hub global para el gaming y los E-sports y lograr atraer turistas y jugadores de alrededor del mundo.
Establecieron el Savvy Gaming Group que ha invertido:
$1.5 mil millones de dólares para comprar ESL Gaming y FACEIT dos de las marcas más grandes de E-Sports
Mil millones de dólares en una participación en Embracer Group una compañía de media y videojuegos
$15 millones de dólares en premios albergando el evento más grande de videojuegos llamado Gamers-8
Para reflexionar
Estas son solo algunas de las inversiones que han realizado, ya que también han invertido en eventos de boxeo, lucha libre (WWE), entre muchos otros, y el ritmo de inversión continúa en aumento.
Este tema plantea varias reflexiones:
¿Realmente tienen la intención de mejorar su imagen y adoptar una cultura más moderna que respete los derechos humanos? ¿O simplemente es un método para engañar al mundo, diversificar sus negocios y mantener sus mismos valores?
Si es la segunda opción, surge la pregunta de cómo pueden competir las organizaciones deportivas, deportistas y empresarios con una potencia que dispone de casi $600 mil millones de dólares para gastar a su antojo.
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Saben si en sus planes de invertir en deportes están dispuestos a hacer algo muy grande y disrruptivo en el tenis? Tanto varonil como femenil. Saludos
Para mi lo complejo es cómo estas inversiones afectan el entorno competitivo dentro del deporte. ¿Cómo compties contra un equipo que tiene cientos de millones de USD para repartir? Ahora, la realidad es que si estas inversiones vinieran de EEUU nadie se cuestionaría cómo afectan al resto del mundo.